domingo, 5 de mayo de 2013

LA VOCACIÓN DEL MAESTRO… NACE O SE HACE?


LA VOCACIÓN DEL MAESTRO… NACE O SE HACE?

A medida que avanza nuestro desarrollo profesional e integral, nos preguntamos cuál será el ámbito en el queremos desempeñarnos y así mismo empiezan las dudas si de verdad es lo que deseamos hacer. En los últimos tiempos la profesión docente ha tenido grandes falencias debido a que algunos de los maestros actuales hacen su labor sin interés por el bien común de sus estudiantes, dicho problema radica en que no lo hacen por gusto sino por obligación.
De tal manera que viene al caso preguntarnos si, la vocación del maestro nace o se hace? Para responder esta pregunta es preciso aclarar que la vocación (educación) es una inclinación que tienen las personas hacia el ejercicio de la enseñanza. No es un mito, sino una realidad, que resulta de condiciones de vida y contextos determinados. Así entendida, en este trabajo se considera factible favorecerla y desarrollarla, rebasando la concepción tradicional de que la vocación simplemente esta presente o ausente, sin intervención del sujeto, y determina sus posibilidades de desempeño.

Para empezar, hay que insistir en que la vocación por la profesión docente, no es el resultado de una inclinación espontanea surgida de la nada. La vocación tampoco se debe a factores que geneticamente pudieran determinar que las personas, se orienten indudablemente al ejercicio de esta profesión. Como lo dijo casi medio siglo el maestro español Patricio Redondo: "Rechazamos la idea del que maestro nace: no sabemos en virtud de qué elementos genéticos especiales le inducen a ejercer esta profesión. No, el maestro se hace; el maestro es capaz de prepararse bien y actuar de un modo eficiente con los niños. Todo depende de la actitud que adopte ante su tarea". ( Redondo, cit, por Costa Jou, 1974:45) 

De esta manera se puede decir que la docencia es una acción individual y social que aparece gracias al acercamiento de la persona con la actividad pedagógica, ya que nadie podría tener un verdadero interés hacia la educación sino la conoce previamente. La vocación por ser maestro no surge de un llamado extra subjetivo sino de diferentes aspectos que influyen en la vida diaria del sujeto que decide acercarse a la pedagogía interactuando con grupos escolares. De modo que “querer ser maestro” depende de muchos aspectos sociales, intelectuales, afectivos, que contribuyen a desarrollar plenamente en el sujeto actitudes y habilidades propias de un buen profesor y que se perfeccionan día a día con la práctica de la docencia.

“Nunca consideres el estudio como una obligación, sino como una oportunidad para penetrar en el bello y maravilloso mundo del saber”. Albert Einstein. 


Ahora bien, enseñar es un arte, y tener vocación por la docencia significa como mínimo tener aspiración por dominar ese arte, de las habilidades y aptitudes propias de la enseñanza. Además de acuerdo con Erich Fromm, hay por lo menos cinco requisitos generales para la práctica de cualquier arte: se requiere disciplina, concentración, paciencia, preocupación y un acercamiento gradual. Son precisamente estos requisitos con los que debemos comprometernos a lo largo de nuestra carrera como docentes, y no es solamente de un tiempo determinado, es realizarlos constantemente pues para alcanzar el dominio de la docencia no hay un tiempo límite, ya que la educación se trasforma a medida que las necesidades de la sociedad cambian.

En conclusión, la vocación se trasforma en el pilar fundamental para motivar a quienes seremos formadores de personas, guías pedagógicos, orientadores de procesos de crecimiento. Haciendo nuestra vocación, los desafíos educacionales se enfrentarán de una mejor forma, y los beneficiados serán los alumnos, además al maestro le quedará la satisfacción y la autorrealización. De esta forma, lo anterior será esencial para entregar lo mejor a la juventud, en una época donde hay cambios radicales, en lo político, social, económico, cultural. Es por esta razón que con un trabajo hecho con amor, entrega y todas las energías puestas en buscar un mejor futuro y progreso dará buenos resultados, teniendo y creando vocación se sembrará en terreno fértil, la juventud, jóvenes autónomos, democráticos, exitosos y felices.

“Donde haya un árbol que plantar, plántalo tú. Donde haya un error que enmendar, enmiéndalo tú. Donde haya un esfuerzo que todos esquivan, hazlo tú. Sé tú el que aparta la piedra del camino”. Gabriela Mistral. 

Bibliografía:
Profesor, RUIZ, Flores Dueñas Julio Cesar. La vocación, el perfil de ingreso y la formación de nuevos docentes. UPN (Universidad Pedagógica Nacional)

MUNIZAGA, Araya Bernarda Angélica, docente Liceo de niñas Gabriela Mistral de la Serena. Vocación docente: Una clave para mejorar la educación. 



5 comentarios:

  1. Actualmente pensamos que la enseñanza es una carrera mas, pero no somos conscientes de que como tutores nuestros actos recaen en los jóvenes que formamos guiados por el ejemplo que les damos, como se dijo en el texto la enseñanza a parte de muchos factores necesita de vocación, ya que la vocación es aquel factor primordial que permite que amemos nuestro trabajo y demos lo mejor para mejorarlo cada día mas, cuando tenemos clara nuestra vocación como maestros, cualquier problema o limite al que debamos enfrentarnos sera de agrado para nuestra auto-superación tanto personal como profesional.

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  2. Es totalmente cierto que en el mundo actual, tan escaso de valores como la perseverancia y de principios como el pensamiento por el bien común, la manera óptima de alcanzar el conocimiento pasó a ser un simple "mito" o se relegó a las historias de grandes libros que se empolvan en una biblioteca y parecen cobrar vida sólo cuando caen en la mano de un maestro que al verse obligado a enseñar, pretende que sus alumnos aprendan al pie de la letra lo que este libro dice y no se preocupa por despertar en ellos el interés por la investigación y el deseo por aprender. Es por esto que me parece de suma importancia este texto, que resalta el requerimiento fundamental para ejercer la docencia: la vocación. Si existieran más maestros con vocación, la historia de la educación sería diferente.

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  3. No debemos olvidar que la sociedad ha ido deteriorando esta carrera tan esplendida como la docencia, ya sea por culpa de algunos docentes que se centran en el conformismo o por el echo de que actualmente cualquiera puede ser docentes o eso es lo que piensan en la sociedad donde vemos ingenieros, abogados o profesionales de cualquier otra carrera dando clases las cuales solo le conciernen al licenciado, olvidando que el licenciado esta capacitado para ser formador de personas

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  4. la labor docente es la que hace que una sociedad se enfoque en un por un mejoramiento continuo o un degradamiento, por tal razón el docente es quien debe de emplear las mejores técnicas de aprendizaje para generar una motivación en los individuos. pero la verdadera motivación debe nacer primeramente de si mismo pues si esta convencido de su vocación como docente, seguro que dará sus mayores esfuersoz en lograr los mejoramientos requeridos.

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